PUNTO SIN PARTIDA
Aquella
tarde daba igual quedarme
frente a la
computadora,
salir a
cuestionar el precio del abrazo
o atribuirle
a la imprecisión de la brújula
mi punto sin
partida.
Pero algo me
detuvo,
cayó un
mensaje firmado, homicida ante mis ojos.
Como el eco de una guillotina
ese mensaje
se extravió no solo por la casa,
también por
la lágrima,
haciendo
hincapié en estas letras
que ahora
tiemblan
sin el ardor
de las vocales,
como si el
amor danzara
en una
nefasta perdición.
Desde
entonces se me hace difícil
reciclar en
el poema
el reflejo
del colibrí y su retórica,
su lado incierto
y provocador…, su canto
que una vez
vibró con ansia
casi como un
fulgor por mis despeñaderos .
Julia Hernández
De mi libro Cuerdas Contra el Viento
2017
--- poema luciernaga
Comentarios
Se contagia el sentimiento verso a verso.
Felicidades, es muy buen poema.
Besos.